La cuestión es que cada chico/a que viene de visita precisa, necesita, requiere, exige inevitablemente, ir a jugar en alguna de las salas que los sábados están vacías. Daira vino con la mamá.
Ella, o sea, Daira, que es mi amiga igual que la madre que también es mi amiga, es una peque encantadora, pícara, bella y silenciosísima.
Es re-coqueta e innovadora. Por ejemplo: trajo de vincha un velador con moño, más otros dos moños rosados a los costados y un par de sandalias, una de cada color (una blanca y la otra rosada). Sí; el par sobrante, las traía la madre en una bolsa. No sé para qué, "por las dudas para que no crea que están chapis, pensé..." Yo jamás haría eso!!! :-P
Y ahí comenté: ¡¡¡Yo creo que esta nena va a ser artista...!!!
Daira ni mú dijo; primero porque no es vaca, y segundo porque al principio, como todas y todos, es vergonzosa.
Al final, no.
Cansada de estar entre adultos, la pulga, o sea Daira, con una vocecita de pulga claro, no sé que le dijo a Paula, la mamá, o sea mi amiga que me tradujo: "Daira quiere ir a jugar a las salas".
Como también estaba aburrida me fui con ella y de inmediato nos introdujimos en el universo Dairiano que ¡ojo!, tiene sus reglamentos:
primero, estar descalzo, fundamental; después, música: Para chicos? 'No...', Qué te gusta? 'No sé...', Shakira! 'No...' Reggeaton: 'Sí, pero, no...'
Mj... dije... (Mj, es mi expresión para pensar en alguna solución si tengo un problema...)
Ya había decidido qué proponerle cuando veo que toma la iniciativa y va a jugar con las esferas grandes. Ahí nos largamos...
Nos sentamos, nos acostamos, tiramos globos, agarramos el paracaídas, pusimos pelotitas dentro, las lanzamos, volvimos a saltar, nos reímos, y nos cansamos...
No tanto porque, 'al toque', le dije "Tengo fibras!", y al 're-toque' me respondió, "No, armemos este rompecabezas!". 'Bueno, le dije, este que es grande y armás una escultura!' Y me dijo, 'Bueno, y después este que es chico y es de letras!' Mj..., pensé, qué chica rápida y audaz!!!
Me encantan los rompecocos así que el grande enseguida quedó terminado. El más chico, como era de letras, parecía que no nos gustaba demasiado.
En consecuencia apareció la urgencia: ¿Y ahora, a qué jugamos?!!!
¿Recuerdan el "Mj" que usé al principio para pensar?
Bien, lo que había pensado era recurrir al gran Luis Pescetti con sus canciones, juegos, rimas, etc. y le dije: "Dairita, escuchá esto"... ;-)
A esa altura estábamos re-cansadas pero obviamente nos fuimos a ver a Paula y le mostramos lo que, sin querer, habíamos 'aprendido' jugando. Ya era tarde y había que cenar...Y empezamos con Paqué tumé tumé tata que recomiendo, porque los chicos quedan algo así como desconcertados... No entienden nada, pero terminan moviendo el esqueleto siempre. Entonces, siguiendo al maestro Pescetti:(paquetes)
Paqué tumé tumé tata
Paqué tumé tumé tá.(hacer dedo/auto-stop)
Tu tuá tutu e tata
Tu tuá tutu e tá.(ponerse crema)
Aiéme iéme iéme iá
Aiéme iéme iéme iá. (con onda!)Pasamos luego a la de El moco, pero a Daira no le interesó para nada ya que que es una señorita! Y entonces nos aprendimos la de El sapito que según mi amigo Luis, -porque ya que estamos nos hacemos amigos-, dice:- “a” Se debe cantar abriendo mucho la boca y cerrando los ojos.- “m” Se debe cantar cerrando la boca y abriendo mucho los ojos.- La primera vez se lo cantará lento y al repetirlo se lo irá acelerando. Esto es, obviamente, para volver más graciosos y difíciles los movimientos de la boca y los ojos.Si bien es un juego para diferentes edades, les fascina a los más pequeños. Si uno se los canta mirándolos a los ojos, bien cerca de su cara, se quedan como hipnotizados (en caso de que lo intenten y esto no ocurra, despierten al niño, o bien, devuelvan este libro).Y así seguimos, con "Al agua pato", para saber si Dai la conocía, hasta llegar a Tongo-tongo. Tuvimos incluso tiempo de invitar a otros amigos online (Natalia y sus hijos, Ana, Tati, Marce, Rafa, etc., que se engancharon, se pusieron a bailar como locos y 'colgaron' sus fotos en Facebook).
Es que en el universo Dairiano se come y se duerme a horarios pautados y la psicomotricidad, como en todos nosotros, se expresa a cada momento: Juego y afecto, comunicación y apego :-).
Hermosooooooooooooo.Es muy linda tu observacion sobre Daira. Pero lo mas lindo es el AMOR y OBSERVACION detallada de cada chico/a que pasa por tus salas. Tu complicidad con ellos hace que se sientan libres, y las canciones y juegos, los alientan a expresar esa libertad y satisfaccion.